entrevista por Guaro

foto encabezado: Breno Carollo

Philippe es un rostro más que familiar dentro de la escena hardcore de Santiago, y de eso ya van unos cuantos años. Para nosotros en Combustión él es también un eslabón de las metamorfósis de la escena, entre lo que vimos nacer a mediados de los noventa y lo que hoy sigue abriéndose un curso. Es por eso que Guaro partió a su encuentro y pudieron conversar de trayectorias, sensibilidades youth crew y compromiso con la escena local. Acá va todo. 

¿Cómo llegaste al hxc? Desde lo más primitivo hasta formar tu primera banda.

Como muchos de mi generación, llegué al hardcore por el mundo del skate. Antes iban más de la mano y descubrí algunas de mis bandas favoritas a través de videos en vhs, por ejemplo las 411VM (Minor Threat, Dag Nasty, 7 Seconds), Toy Machine (Misfits) o Transworld (Rites Of Spring). El año era 1998 pero no me metí de lleno en el hardcore/punk hasta el 2001. Escuchaba desde heavy metal hasta el rap que pasaban por aquellos videos, más dedicado a patinar que a escuchar música todos los días como lo es hoy. Convergieron varias cosas para llegar al punto sin retorno donde el hardcore lo es todo. Conocí a mi mejor amigo, un gringo de mi misma edad que se vino a vivir a Chile y escuchaba mucho punkrock. A la vez, mi hermana mayor se metió en el ska/punk nacional e iba a tocatas en colegios, Teatro Novedades (festival ska union) o La Laberinto (Lagwagon, etc.). Ellos me mostraron hartas bandas interesantes y me fui dando cuenta de que el heavy metal no era lo mío, en parte por tener letras vacías que no me identificaban. De ahí comencé a revisitar todas las bandas que descubrí un par de años atrás y se convirtió en lo mío. Nunca fue lo mío el tomar copete o tratar de encajar con la gente de mi curso entonces el straight edge es lo que más capturó mi atención. Empecé a ir a las tocatas con mi hermana y mi mejor amigo, la primera fue en la Entrennos en Bellavista. Este nuevo mundo era increíble en todo sentido. Intenso, diverso, agresivo pero positivo. De a poco fui prefiriendo ir a tocatas que andar en skate y llegué a conocer personajes interesantes de los que me hice amigo, como Cris (Floorstage/Güila), Kifo, Cris Stanke que también era skater y Ricardo (alias Piduye de Decisión Personal/X). El 2004 al fin decidí armar una banda con compañeros del colegio ya que cantaba en el coro, no sabía tocar ningún instrumento y me gustaba escribir en inglés. En español mis notas eran malas. Remains To Be Seen (versión colegio) duró un par de meses y gracias a Juampy (En Mi Defensa) y Piduye pudimos tocar en distintas tocatas de Santiago Centro (Lídice) y La Florida (Pub Ocultavio). Mis compañeros tuvieron actitudes cuicas y además quisieron metalizar el sonido de la banda entonces murió rápidamente. Al año siguiente reformé la banda junto a Ricardo y fui conociendo cada vez más gente dentro del hardcore, como Daniel Ríos, alias Foca. Él y yo hemos tocado en bandas juntos sin parar desde el 2006.      

Como sabes, este blog pretende rescatar la memoria de la génesis de la escena hardcore chilena, y luego su posterior proyección en el tiempo. ¿Que fue lo primero que conociste de esa época? ¿Cómo fue eso? ¿Qué te llamó más la atención?

Llegué el 2001 entonces me perdí toda la ola noventera. Vi a Entrefuego muchas veces (siempre desde un costado) y me enteré de que Jero tenía una banda llamada Silencio Absoluto que era más de mi onda. Lo demás lo fui conociendo a través de Pablo (Amendment Records), quien tenía una colección sólida de discos y cassettes en su closet, y también más conocimiento por zines y por conversar con gente más vieja que nosotros. Pasé varios años en la oscuridad por desinterés pero eso fue cambiando después de asistir al show reunión que hizo Disturbio Menor en el Cimarrón en agosto de 2005. Me llamó mucho la atención que sacaran su nombre del 7″ de Teen Idles y a Disturbio le encontré un buen parecido a Dead Kennedys. Le empecé a agarrar el gusto a la música en español y me pareció interesante la historia del hardcore local para ver cómo fue evolucionando a lo que es hoy. Recuerdo que el metalcore me cargaba y justo estaba en su peak durante mis primeros años en tocatas. Fue un cambio agradable el escuchar las bandas del ’96-’00 que sonaban más oldschool y primitivas. Mis favoritas hasta hoy son Redención 9.11 y Silencio Absoluto. También me encanta el demo de Illuminati pero eso ya es segunda o tercera ola. 

Si tuviéramos que hablar de tu aporte en la escena, ya sea por medio de bandas, zines, distros, etc. ¿Cuál sería este aporte? ¿Nos puedes contar un poco de cada uno de esos proyectos? ¿Siguen activos?

He participado en varios proyectos y algunos de ellos siguen activos. Canto y escribo en Remission, banda que lleva 10 años activa y es la que más estimo. En orden cronológico, de más reciente a pasado, aún canto en Invierno (emo noventero con integrantes de Remission, activo desde el 2010), canté en Souvenir (hardcore melódico ’13-’18), Remains To Be seen (’05-’07 la versión que me importa) y toqué bajo en Approach (’05-’07). Las dos últimas bandas son consideradas las primeras bandas youth crew en inglés de Santiago. Aparte de bandas, participé durante varios años como mano derecha, distribuidor y diseñador gráfico del sello Amendment Records. Pablo impulsó el formato vinilo antes que se pusiera de moda y editó el 7″ de Remains To Be Seen “Defined Identity”. Creo que está dentro de los 5 primeros discos de hardcore chileno en salir en vinilo, después del compilado “Algo de música de un país con nombre de ají” y “Heridas Abiertas” de Disturbio Menor y material de Sin Apoyo. No cuento ni Fiskales ni Malgobierno porque eso para mi es solo punk, no netamente hardcore. Después de eso se editaron muchos discos más de bandas como Contra Todos Mis Miedos, Entrefuego, Waterglass, etc. y siempre ayudé en lo más posible, ya sea con afiches para tocatas o montando ferias en las tocatas. Cuando Amendment diversificó sus lanzamientos y se trasladó a Montana, EEUU, me hice cargo de la distribución en Chile pero eso está casi extincto. Actualmente importo música de afuera y hago chapitas bajo el nombre de Hardwave Distro. “Hard” de hardcore por ser lo que más amo, y “wave” de new wave ya que los discos ochenteros de bandas como New Order o Depeche Mode son lo que mantienen vivo el proyecto. La gente dentro del hardcore/punk ya no me pide tantos discos como antes, ya sea porque ellos mismos pueden hacerlo con sus tarjetas o que la economía está mal y hay otras prioridades por supuesto. De repente ayudo a organizar tocatas aunque no estoy tan motivado como antes, será por el cambio de energía y tiempo reducido.

Cuando pienso en Phil, yo de una me imagino como un personaje que une la escena a la que yo pertenecí con la que esta pasando ahora. Siento ese link, que si yo converso contigo sobre algo antiguo tendrás conocimiento y pienso que lo mismo sucederá si hablamos de algo más actual. ¿Sientes que este cuento del hardcore se encamina para algún lado? ¿Tiene bases sólidas? ¿O crees que cada vez se esta “anichado” en un grupo de weones cada vez más freak?

Ya que es cíclico, jamás va a morir. El hardcore seguirá vivo e irá renovando sus participes igual a como lo ha hecho los últimos 38 años. Aunque haya menos gente que antes, igual tiene sus bases sólidas y gente motivada que se esfuerza por organizar encuentros, grabar discos, salir a tocar fuera de la capital o del país, etc. Lo que mencionas de los nichos se sigue dando y está bien. Cada grupo de personas puede compartir con quien se le de la gana. En lo personal me gusta la diversidad en tocatas para que se exponga a nuevos sonidos e ideas pero no en un contexto de unidad forzada. Hay que conocer las posturas antes de estar creando afinidad o ampliando el abanico solo porque sí. Si algo no te identifica, déjalo ser y ya fue. De repente uno ve una buena mezcla de bandas pero resulta que igual va poca gente porque el público no está dispuesto a solo ver a una banda de su estilo favorito, por la tanto la intención fracasa pero se hace el intento. Al hardcore le hace falta gente más freaky y creativa. La era digital ha pacificado la rebeldía y la buena locura.      

El otro día leía una entrevista de un weón que hacía TRAP y el loco se auto-glorificaba de que lo que hacía era igual que hacer hardcore. Argumentaba que no existía diferencia entre la libertad que él experimentaba al hacer lo que hacía hoy y lo que podría haber hecho en su tiempo Minor Threat, por ejemplo. Yo bajo mi manera de viejo culiao de ver las cosas, por supuesto que no le compré en nada su argumento, más que para validarlo o darle algún carácter de street, o real o de peso, comparándolo con el hardcore. ¿Estoy muy viejo y obsoleto al hacer ese análisis? ¿Qué opinas al respecto?

La semana pasada almorcé con un sonidista del Teatro de la Universidad de Chile que trabaja con las orquestas y me comentó que bajo ciertos principios de la música, gran parte del trap no lo es. Creo que tú tienes razón y la edad no importa. Si mencionas libertad, todos los que la tenemos podemos usarla y enfocarla a crear algo, ¿pero cuáles son las razones? Ego, fama, dinero, drogas, misoginia y todas esas basuras tienen cero que ver con Minor Threat.  

Cuando empecé a tocar en la escena que se estaba creando, con Alternocidio, muchas veces nos paso que nos gritaban cuicos, o que, por ejemplo, no les gustaba que cantáramos de skate porque supuestamente era algo a lo que no mucha gente tenía acceso. Derechamente nos discriminaban. ¿Te ha pasado algo parecido en todo este tiempo? ¿Por cantar en inglés? ¿Por hacer giras al exterior? ¿Por no tener el estilo tipo Madball, por ejemplo?

Sí, hay varias anécdotas relacionadas a la discriminación. Nada que nos haya afectado eso sí. La expresión es libre y uno debería sentirse cómodo con lo que hace y no darle bola a las críticas o chismes. Crecí de Plaza Italia “para arriba” y eso no es algo que uno elige, como el país donde uno nace. Recuerdo comentarios mala onda por ser straight edge y comer carne (menos mal que ya no). Era visto como raro ya que el hardcore/punk sudamericano siempre ha sido más politizado, pero yo no crecí con Nueva Ética o Point of no Return. Con bandas como Youth Of Today o Insted me fui familiarizando con el vegetarianismo pero me tardó varios años en sensibilizarme al tema. Sobre el inglés también oí críticas, a veces ignoradas o cuando se daba la oportunidad, conversaba el tema. Nuevamente, por el contexto multicultural bilingue en el que crecí, hablo mejor inglés que español y ahora soy profesor de eso. Creo que suena mejor y tiene que ver con las bandas que crecí escuchando. En mi hogar sonaba Fleetwood Mac o The Police, no Silvio Rodriguez o Victor Jara. En parte soy un producto de mi entorno y lo acepto. Más adelanté cuando canté en español con Invierno y Souvenir, me di cuenta lo difícil que es para mi y no me gusta. Tema aparte, una vez en una tocata en Lima, se nos acerca un tipo medio copeteado y me pregunta si Remission pudo girar por Europa porque eramos hijos de diplomáticos o eramos ricos. Un prejuicio absurdo, ya que los cinco tenemos distintos rubros no tan lucrativos y la forma de viajar siempre ha sido trabajar y ahorrar. Y lo del sonido, mucha gente piensa que el oldschool o el youthcrew es de cabro chico. Una vez en una tocata en La Gota (Nataniel Cox), estábamos tocando con Approach y un gigante de atrás nos gritó “tóquense una de Madball pa’ los de verdad”. Lamentablemente no eramos suficientemente “verdaderos” pero tocamos “As One” de Warzone y esa talla nos quedó grabada por mucho tiempo.   

    
Recuerdo una vez, si mal no recuerdo en el Primer Encuentro Hardcore, vi cómo acuchillaban a un weón rusio que pintaba el mono en el mosh. No recuerdo si quedó mal herido o qué. ¿Recuerdas alguna historia así en alguno de tus recitales? ¿O recuerdas alguna historia increíblemente extraña que haya pasado? ¿O increíblemente grosera?

Tan brutal como una acuchillada no, pero sí he visto cosas bizarras en los últimos 17 años. Me acuerdo de mi amigo Victor que se tiró una vuelta de carnero perfecta desde el balcón de Bucarest (primer show reunión de Entrefuego, 2008) y al poco rato una mujer de peso pesado se tiró del balcón en posición sentada, dejando inconsciente a un tipo. En una tocata de Remission en el Iruña de barrio brasil, un tipo se metió al mosh muy violentamente y lo boxearon afuera para que no regresara. En otra ocasión, organicé una tocata en un taller de graffiti en Bellavista y entró un travestí a dar jugo, jotearse a gente del patio donde estaba la feria y tratar de robar cosas. Son varios recuerdos bizarros.   

¿Te dan ganas de expandirte fuera del hardcore? Por ejemplo, no sé, hacer una banda pop e intentar vincularte con escenas tipo Quemasucabeza o ese tipo de escenas?

Para nada. No conozco bien ni me interesan las escenas mainstream. El underground es lo mío y si alguna vez hago música pop o no hardcore, va a conservar ese carácter.  

¿Hasta qué edad uno puede presentarse en vivo vistiendo la X en la mano? ¿Hasta qué edad uno puede seguir cantando sobre mantenerse puro?

No hay límites. Si alguien tiene 50 años y quiere rayarse la X o la tiene tatuada, que así sea. Yo tengo 32 y me la sigo marcando a veces, cuando me da la gana. Más cuando toco que cuando asisto, como una tradición romántica. Creo que con “mantenerse puro” haces alusión al straight edge, pero esa palabra es muy ambigua y peligrosa ya que los fascistas la ocupan. Cantar sobre ser straight edge es relevante para los sentimientos y expresión de esa persona y es cosa de uno. La última vez que hice una letra sobre llevar una vida sin intoxicaciones fue el 2006. Hoy en día prefiero abarcar otros temas personales o sociales y me interesa más el veganismo que el straight edge. Ser edge es algo individual mientras que el veganismo tiene un efecto global en el medio-ambiente y las vidas inocentes de los animales.        

¿Por qué Verbal Assault? ¿Por qué Texas Is The Reason? ¿Por qué Lifetime?

Esas 3 fueron grandes inspiraciones para escribir o componer. Cada una de ellas es pionera en su subgénero y poseen un gran carácter creativo e innovador. Verbal Assault me supera, es adictivo para mi.   

Muchas veces, y muy seguido, yo siento que este es un país de mierda. Sobre todo en relación con la música que he realizado, en distintas bandas y proyectos, y la poca o a veces nula recepción de los medios, o de la gente en general. ¿Te pasa algo parecido? ¿Esperas algo más de lo que haces y la recepción sobre todo de este país? ¿O te importa un carajo?

Te entiendo, pero no espero nada más de lo que percibo y sí, me importa un carajo. Nos desenvolvemos dentro del hardcore y no busco ampliar el público a bares con restricción de edad. Hay un dicho: “hardcore for hardcore” y listo. Estoy muy contento con el último disco de Remission “Enemy Of Silence” y quiero que la gente del hardcore lo escuche, pero de ahí a que lo aprecien es cosa de ellos.

  

¿Crees que alguna vez Revelation finalmente edite un disco de Remission?

Fue una broma que tiramos este año en nuestra última gira por Estados Unidos. Algo así como el último hito de la banda antes que muera. Sería increíble que nuestra grabación final, un 7″ (tipo Salad Days) saliera por Rev. Veremos qué pasa y depende de nosotros movernos. 

A veces al ver las noticias o los millenials o ver restoranes veganos o marcas veganas o weones hablando con lenguaje inclusivo, etc no dejo de sorprenderme de lo vanguardista que fue al menos la escena hardcore que yo conocí. En esa realidad del 96/97 ya era “normal” respetar a los gays, o ya era común ver gente vegetariana, y algunos veganos, era pan de cada día odiar en mala al McDonalds, etc. De alguna manera al ver toda esta parafernalia millenial siento un poco de orgullo, de ver que entrecomillas íbamos por el buen camino. Que no era una volada o un extremismo la cosa. ¿Te paso algo parecido? ¿Crees que en un futuro será más común hablar de veganismo que de comerse un asadito para ver el partido de Chile? ¿Falta mucho para eso?

Sí, algo parecido. Las ideas siempre han estado pero ahora con internet se han expandido más. Me parece bien que se discutan temas como xenofobia o feminismo en el hogar o en las calles, cuando antes no era tan común. En la contracultura los valores igualitarios siempre salieron a la luz y nos identificaban por sentido común, previo a grandes marchas o sucesos indignantes. Ojalá que el veganismo se convierta en una práctica común y masiva, tanto como lo es comerse un asado hoy en día. Falta muchísimo aún y lo fuerte que te codifican las tradiciones lo convierte en un remo contra la corriente, pero está creciendo. Decir la palabra “vegan” y que te entiendan ya es algo más cotidiano y la gente está más consciente de este estilo de vida, la crueldad hacia los animales y el deterioro medioambiental. 

  
Hace un par de años descubrí algo y es que he estado investigando un tema que quizás no conoces: La Alianza vs. El Cabal. Por si no lo conoces básicamente es la lucha de la humanidad (lo que tú y yo creemos que es humano) vs. una suerte de influencia de Reptiles y la elites de este mundo. Durante este estudio he descubierto que en teoría estamos en una suerte de etapa en que La Alianza (los buenos) estarían al fin cagándose a estos csm del Cabal, illuminati, same shit. ¿Sabes algo de esto? ¿Te interesa el tema? ¿Cuéntame si es que sabes algo al respecto y cuál es tu opinión?

No sé nada de eso, pero cuéntame algún día. Son interesantes las teorías de conspiración porque el ser humano es capaz de hacer de todo (bueno y malo), cosa que las explicaciones que dan podrían efectivamente suceder.      

¿Si tuvieras que cambiarle algo al Jero, qué sería?

Haha, nada. Que los cambios sean propios. Antes lo weveaba por su fetiche a las Nike Airmax pero ya vendió varias. Siempre he sido y seré team Vans.  

Gracias por tu tiempo bro. Por favor incluye fotos, bandcamp de los discos de tus proyectos, distro, etc.

Gracias a ti por la constante buena onda y tus esfuerzos colectivos de documentar la escena. “No hay mañana sin ayer” como decía Redención 9.11 y ojalá el sitio abarque tanto el pasado importante como el presente relevante.

REMISSION – https://remissionhc.bandcamp.com | instagram: @remissionhardcore

HARDWAVE DISTRO – https://www.facebook.com/hardwavedistro | instagram: @hardwavedistro